Tres cuentos perfectos para comprender el mundo.

Hoy te enseño 3 cuentos que utilizo para trabajar el conocimiento del mundo, las emociones, las personas, la naturaleza y sus habitantes. Son cuentos perfectos para ir contando desde bebés, para seguir leyendo conforme van creciendo y también son cuentos suuuper interesantes para trabajar desde la diversión, todos esos aspectos del mundo que nos cuesta comprender, como pequeños extraordinarios (con TEA o TGD, por ejemplo).

Primeras alegrías: Este es un cuento precioso por Véronique Joffre, tiene formato de libro grande tipo novela de adulto pero las páginas son de cartón, me gusta mucho que sea grande y a la vez resistente porque permite que exploren de forma independiente desde bien bien pequeños.

Cada página tiene una ilustración preciosa con muy buen contraste de figura-fondo, con situaciones por las que pasan los bebés y niños pequeños y en la página de al lado, una ilustración de un animal y sus crías, que representa el mismo momento, desde otra perspectiva.

Por ejemplo: “Amamantarse (gatitos en un cesto mamando) y dormirse junto a mamá (bebe lactando en brazos de mamá quedándose dormido)”, o “Sentir el aire fresco (3 conejos saliendo de su madriguera) y el perfume de las flores (niña oliendo una flor en el campo)”.

Yo lo contaría con ritmo y a poder ser, siempre el mismo, de forma muy pausada, y repitiendo cada frase dos veces y quedándose ahi las primeras veces. Permitiendo saborear cada dibujo, color, personaje y acción.

Me gusta mucho esta forma de tratar las primeras veces y explicarlas con amor, desde un lugar de conexión con la infancia que desde luego llega a cualquier pequeño, especialmente aquellos que tienen dificultad entendiendo el mundo que les rodea. Si en ocasiones ves que tu pequeño o pequeña puede estar teniendo dificultades para comprender cómo funciona el mundo, además de animarte a buscar ayuda o una opinión externa, cuentos como este, formas de explicar el mundo simples a la vez que delicadas son sin duda una opción perfecta. Y de hecho si ves que hay algún momento de vuestro día a día que le cuesta especialmente, coge tu cámara, haz fotografías realistas y escribe con frases sencillas y cortas lo que está ocurriendo. No hay mejor cuento que el que describe algo de forma 100% realista para alguien que necesita entender.

Estamos aquí (Notas para vivir en el Planeta Tierra): este lo he puesto el segundo porque no quería que se me notara, pero lo vais a notar :´) este es el cuento más increíble, delicado, simple y descriptivo que hay, las ilustraciones son una autentica maravilla, el autor es Oliver Jeffers y yo tengo como objetivo hacerme con toda su colección y no voy mal, (¿es obsesión?). Cada página describe con ilustraciones que son como cuadros nuestra posición en el mundo, empezando por el sistema solar. Es un cuento para leerlo, pero verás que incluye notitas de un humor muy infantil, acompañado de una ilustración, que puede llegar a pequeños extraordinarios que no comprendan bien el humor.

Lo que más me gusta es que en medio de explicaciones basadas en datos, añade tanto ese humor como valores para cuidar la tierra o a los demás. Por ejemplo “ Parece grande, la Tierra, Pero somos muchos los que vivimos aquí (7.327.450.667 y subiendo) así que sé amable, hay suficiente espacio para todos”. Me gusta mucho esta forma de explicar el mundo para pequeños extraordinarios con TEA especialmente. Es un cuento de leer y leer y no cansarse, y que te deja con una sensación preciosa. Solamente con las ilustraciones despierta esas ganas de querer saber más, de querer salir a explorar y a la vuelta encontrar algo visto en el libro, un atlas con valor extraordinario.

Además, a este cuento le siguen una serie de cuatro cuentos de cartón donde con las mismas ilustraciones se hablan de Opuestos, Números, Colores y Animales.

Un año en el Bosque: de Emilia Dziubak, es un cuento grande, de cartón, y páginas sin márgenes, llenito hasta arriba de ilustraciones que van mes a mes, desde Enero hasta Diciembre, retratando los cambios por los que pasa la misma escena en el bosque según cambian las estaciones. Hay muchísimos tipos de animales sobre los que hay una leyenda al inicio para saber un poco más de ellos cuando nos entre curiosidad, pero el objetivo es fijarse en los detalles, el estilo me recuerda a “Buscando a Wally” en versión infantil y tratando de explicar un poco los cambios de la naturaleza a todo detalle. Lo que más me gusta es que de forma visual, sin hablar ni necesidad de explicar, teniendo el libro grandote en las manos, pueden llegar a entrar dentro de la escena sin esfuerzo, como cuando nosotros vamos al cine.

Me gusta la idea de explorarlo sin ninguna prisa, es un cuento en el que se pasarían horas mirando túneles subterráneos llenos de topos y gusanos en invierno y esos mismos túneles que se van vaciando conforme llega la primavera.

Se puede utilizar a modo juego buscando a un personaje a través de los meses y darle un fin, el reconocimiento sobre papel. Además en la última página hay un laberinto que ir trazando con el dedo para ayudar a los insectos a cruzar la página, con depredadores de por medio, así que se puede convertir en un juego genial que hacer juntos.

Una forma lúdica y llena de ilustraciones inspiradoras para empezar a comprender los mecanismos de las estaciones, los animales y el bosque.

Espero que te haya gustado este recopilatorio de tres cuentos que me enamoran, yo los compré en Kubo en Valencia, pero seguro que puedes encontrar un negocio pequeñín donde los vendan donde estés.

Y recuerda que no hay mejor cuento que el que eligen ellos cuando les permitimos mirar y mirar hasta encontrarlo.

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